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Desde el punto de vista etnográfico, las acciones sociales se derivan de lo que los sujetos perciben, comprenden e interpretan de la realidad, lo que implica plantear hipótesis que permitan hacer relaciones entre la subjetividad de las personas, para llegar a elaborar aproximaciones de los verdaderos significados (Bernal, 2010).

En este sentido, un estudio etnográfico propicia el análisis de la realidad mediante la reflexión y la crítica acerca de lo que se estudia. Este tipo de diseños se enfoca en el análisis de la cultura, desde distintas categorías, temas o patrones (Hernández, Fernández y Baptista, 2014). Se trata pues, de desentrañar los significados de los grupos de individuos dentro de un contexto determinado. La etnografía como método de investigación tiene como propósito “conocer el significado de los hechos de grupos de personas, dentro del contexto de la vida cotidiana” (Bernal, 2010: 65). Por ello, tiene como objeto de estudio todo tipo de organizaciones, como las comunidades indígenas actuales, empresas, grupos, equipos, familias, etc. (Hernández, et al., 2014).

Debido a su naturaleza, presenta como rasgos principales los siguientes:

  • Es un método de campo, pues se efectúa en entornos donde viven las personas cotidianamente, no en laboratorios donde el investigador controla los elementos a observar o medir.
  • Es personalizado, toda vez que los investigadores mantienen contacto cercano con el grupo de estudio, al ser simultáneamente participantes y observadores de la vida de los sujetos.
  • Es multifactorial, pues debe valerse de dos o más técnicas de recolección de información -sean cualitativas o cuantitativas- para triangular los datos y asegurar la validez de las conclusiones obtenidas.
  • Representa un compromiso a largo plazo, dado que los investigadores que lo aplican deben interactuar con los individuos que estudian, lo que implica periodos desde varias semanas a un año o más.
  • Es inductivo, puesto que se lleva a cabo a partir de la conjunción de detalles descriptivos para conformar patrones generales o teorías explicativas.
  • Es dialógico, toda vez que los sujetos de estudio pueden opinar sobre las conclusiones e interpretaciones derivadas de éste.
  • Es integral, pues la intención de la etnografía es ofrecer –en la medida de lo posible- una imagen de la vida cotidiana de un grupo en un escenario determinado y contextualizado (Angrosino, 2014, p. 35-36).

Debido a estas características, es un método apropiado para las áreas de ciencias sociales y humanidades e incluso para las de tipo económico administrativo, como economía.

¿En qué consiste el diseño metodológico de tipo etnográfico?

Dada la naturaleza de esta metodología, Bernal (2010) refiere que el proceso de investigación etnográfica debe ser muy flexible, en el sentido de que no sigue un esquema rígido de aplicación, puesto que todo va determinado por las cuestiones que el investigador se plantea de inicio y que luego va confirmando o descartando a partir de sus observaciones, su convivencia con el grupo y su adaptación a las circunstancias del contexto. Es así como el investigador interactúa con las personas, de manera que va conociendo sus modos de pensar, de actuar, de relacionarse con otros. Ésta, debe darse en dos facetas: la primera, participando en el grupo, de manera que su presencia no distorsione o influya en el ambiente de los participantes o del contexto; la segunda consiste en no perder de vista su actitud crítica como investigador, pues debe ser capaz de que sus propias concepciones no intervengan en la interpretación de lo observado.

Es importante mencionar que el investigador debe integrar la información recolectada desde el primer momento en que contacta al grupo de estudio, de manera que cuente con un portafolio o base de datos, donde además de hacer sus registros, elabore la triangulación –por lo menos desde dos fuentes distintas- de la información obtenida (Hernández, et al., 2014).

Para la recolección de información, el investigador puede hacer uso de diversas técnicas como:

  • Observación participante estructurada
  • Diarios de campo
  • Experiencias autobiográficas
  • Grabaciones y filmaciones
  • Guías de interpretación de la información

Como puede observarse, las técnicas sugeridas se enfocan en la recolección de información cualitativa, puesto que se centran en la observación, la descripción, la escucha, la interpretación, la narración. Por ello, César Bernal (2010) señala que en este tipo de investigación no son de mucho interés los datos meramente cuantitativos, sino las caracterizaciones del grupo dentro de un ambiente natural y específico.

Si te interesa ampliar la información presentada hasta aquí, te invitamos a consultar las referencias que hablan sobre el tema y que se encuentran disponibles en las bibliotecas universitarias.

Referencias

Angrosino, M. (2014). Etnografía y observación participante en investigación cualitativa. (Tomás del Amo y Carmen Blanco, trads.). Madrid, España: Morata/Colofón (Trabajo original publicado en 2007). Bernal, C. A. (2010) Metodología de la investigación. Colombia: Pearson Educación. Hernández, R., Fernández, C. y Baptista, P. (2014). Metodología de la investigación. México: Mc Graw Hill Education.

Elaborado por: ARR